Monique Pendergrast

Katie McGrath

Lady Morgana Pendragon

23 Años

Camelot

Heterosexual

Estudiante de Artes Escénicas

» DESCRIPCIÓN FÍSICA:
Su apariencia no cambia apenas en la universidad. Lleva la melena igual de larga, aunque suele llevarla más suelta, agitándola de un lado a otro mientras se pasea como la reina del campus. Sigue llevando lo que podría considerarse ropa de la más cara en el mundo moderno, pero también ha cambiado las largas faldas de sus vestidos medievales por las mini faldas actuales. Tacones altos, vestidos escasos y escotes exuberantes es lo que la definen ahora, llevando un estilo bastante provocativo pero con mucha clase.

» IMAGEN DEL PERSONAJE DE CUENTO:
Morgana es una mujer hermosa y de aspecto delicado, como toda noble, aunque hay algo en su belleza que no solo resulta atrayente, sino también peligroso. De largos cabellos negros ondulados, que llegan a la altura de sus caderas, piel pálida y tersa, carnosos labios rosados y una mirada profunda y enigmática. Sus ojos son de un tono azul verdoso, con matices de ambos colores entremezclados, salpicados en ocasiones de pequeños reflejos dorados que se marcan con las luces de su entorno. Resultan exóticos y atrayentes, y aunque muy expresivos, a veces se puede sentir en ellos la frialdad de su corazón roto, por las diversas razones que ella considera. Como en todo hechicero, toman un color ámbar cuando hace algún tipo de magia.
De estatura media, delgada y esbelta, se nota que Morgana ha vivido la mayor parte de su vida en un castillo. Suele llevar preciosos vestidos de las telas más filas y elegantes, en tonos intensos como el violeta, azul oscuro, rojo sangre o verde brillante, aunque a veces también puede llevar vestidos en tonos blancos, plata o dorados. El negro suele utilizarlo más para ropajes de campo o más cómodos, aunque es de sus colores predilectos junto con el rojo sangre.
Normalmente lleva su larga melena trenzada o en algún complicado recogido, pero últimamente suele llevarla suelta salvo cuando está en la corte.




» DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA GRIMMWELT UNIVERSITY:
Como Monique Pendergrast, Morgana no ha cambiado demasiado, pero sí que es mucho más inmadura e irresponsable, y le falta ese carácter más sereno de gran actriz que realmente posee de forma natural.
Ahora es una niña caprichosa, acostumbrada a que puede tener todo lo que quiere. Apenas coquetea un poco con algún chico, este suele hacer por ella lo que quiera, que normalmente suele reducirse a llevarla las cosas de un lado para otro como si fuese un mulo de carga.
Actúa como si el mundo entero besase el suelo que pisa, y cuando no lo hacen, se enfada, y de inicio actúa de forma cruel y retorcida. Todo va bien mientras se salga con la suya, pero cuando no lo hace puede coger verdaderas rabietas, hasta el punto de destrozar parte de su habitación, pero como siempre, eso se arregla tan fácil como descolgar el teléfono y pedir a papi el número de la tarjeta.
Es bastante atrevida. No le importa tener cierta fama de golfa y ella lo atribuye a que le da oportunidades a tíos que no están a su altura, y apenas lo muestran, los cambia por otro mejor. Es muy directa, pero tiende a serlo en el mal sentido. Miente cuando le conviene y muestra demasiada sinceridad cuando también le viene bien.
Por lo general no guarda lealtad a nadie, porque considera que nadie está a su nivel hasta el momento. Es bastante malintencionada y retorcida, pero en el fondo no es más que una niña mimada que se frustra cuando no consigue lo que quiere, que aunque sea en pocas ocasiones, alguna vez llega a pasar.

» PERSONALIDAD DE CUENTO:
Pese a la pérdida de sus padres, cuando era niña, Morgana se mostraba como una muchacha dulce y risueña, alegre, bondadosa y con una gran conexión con Arturo, hijo del rey y su mejor amigo en aquella época, y el joven Merlin, aprendiz de galeno, con quienes estaba muy unida. Incluso durante su adolescencia mostró esa dulzura y simpatía, llegando a convertirse en una joven cálida y talentosa, pero las cosas cambiaron cuando el don de la magia se hizo más potente en ella. Saber lo que el rey Uther pensaba de los hechiceros la hizo esconderse y desconfiar, y con el tiempo empezó no solo a odiarle, sino a sentirse reprimida y temerosa de que su tutor descubriese lo que era en realidad. Distanciándose bastante de sus amigos, su corazón se fue volviendo más frío, y la desconfianza y las malas compañías terminaron haciéndola ver que Uther era la causa de todos sus problemas. Se convirtió poco a poco en una mujer vengativa, rencorosa y desconfiada, llegando incluso a aprender a manipular a Uther para intentar que, si llegase a enterarse de su secreto, pudiese controlarle igualmente. Mientras su corazón se oscurecía y los días pasaban, el cariño que en su día sintió por Arturo y Merlín se fue convirtiendo en envidia y odio, pues los creía diferentes a ella y con vidas más sencillas, sin saber que Merlín compartía su misma carga. Sus celos la fueron consumiendo hasta llegar al punto de que, al enterarse de que era hija de Uther, considera que merecía el trono más que Arturo, urdiendo retorcidos planes para intentar robarle el trono. Actualmente Morgana sigue envenenada, aunque es una perfecta actriz, y pese a poder mantener una fachada de dulzura y generosidad, bajo esa mascara se encuentra una mujer envenenada por la envidia y escudada en que las dificultades de su vida son lo que le han hecho convertirse en quien es ahora, y que por ello merece un resarcimiento.

» HABILIDADES Y CONOCIMIENTOS:
Morgana es una poderosa bruja con gran potencial mágico, casi a la altura del mismísimo Merlín, pero al contrario que él, ella decidió utilizar su don para hacer daño y perjudicar a otros. La magia negra es su especialidad.
Puede controlar elementos como el fuego o la tierra, normalmente lanzando bolas de fuego o generando algún temblor. También es capaz de realizar poderosos maleficios y encantamientos de magia negra, si tiene los ingredientes apropiados, pero sin duda su don más peligroso es la metamorfosis, don que ha perfeccionado los últimos años. Aunque no puede tomar ninguna forma animal, sí que puede tomar la apariencia de la persona que desee. Aun así un uso prolongado de esta habilidad la debilita y suele sangrar por la nariz si se fuerza demasiado, quedándose un par de días algo más pálida y débil.
Aunque también posee conocimientos de sanación, no es algo que use a menudo, y consigo misma no puede aplicarlos. Obviamente al no haberlos potenciado no llega a la altura de los conocimientos de Merlín.
En cuanto a Monique, en este nuevo mundo, sus poderes han desaparecido, pero en cierto modo su pasión por el Arte Dramático y la interpretación es un reflejo de su capacidad para cambiar de aspecto y fingir ser alguien que no es. Es bastante buena actriz, aunque tiene muy poca paciencia, pero hay que reconocerle cierta tenacidad con todo lo que se propone, aunque por lo que general no sean aspiraciones muy nobles. También se podría considerar como una habilidad el ser capaz de andar e incluso correr perfectamente pese a la ajustada ropa y altos tacones que lleva de forma habitual. Tiene dotes de liderazgo, aunque le falta tacto para aplicarlas, y también un talento natural para la mentira.



» PASADO:
Dependiendo de cada punto de vista, la historia de Morgana puede ser fácil o difícil, alegre o triste, pero está claro que desde el suyo no ha sido la que se habría merecido.
Desde pequeña entró bajó la tutela del rey Uther Pendragón. Cuando era muy niña, su padre pereció en batalla y perdió a su madre poco después. Se crió junto al hijo del rey, Arturo, un par de años más pequeño que ella, y junto a Merlin, un joven plebeyo, aprendiz del galeno de la corte.
Durante años tuvo una vida feliz. Había perdido a sus padres, y también la madre de Arturo falleció cuando eran muy pequeños, pero tenía a Uther, su tutor, y también a sus amigos. Arturo se convirtió casi en un hermano para ella, y pese a ser un plebeyo, Merlín era uno más, ese niño dulce y curioso bajo la tutela del sabio Gaius.
Los años pasaron y Morgana se convirtió en una joven hermosa, cálida y gentil, viendo como a su lado Arturo llegaba a ser un príncipe algo arrogante a veces, pero fuerte y noble que Camelot necesitaba, y Merlín pasaba a aprender más de Gaius para ocupar su lugar algún día. En su vida entró también una joven sirvienta, Guinevere  “Gwen”, que durante un tiempo fue una gran amiga para ella.
Pero todo cambió cuando la poderosa magia de Morgana empezó a manifestarse. Ella sabía que Uther odiaba la magia, se conocían por todo el reino las restricciones al respecto y temió que la persiguieran como a tantos otros brujos en el pasado. Debido a esto empezó a asustarse, a encerrarse en sí misma y a odiar a Uther, pensando que si odiaba a aquellos que eran como ella, no podía quererla como aseguraba. Se distanció de Arturo, de Merlín y hasta de Gwen. No supo de inicio que Merlín compartía su misma carga, y fue entonces que conoció a otros como ella, en una de sus escapadas para reflexionar en el bosque. Otros practicantes de magia la alentaron en sus suposiciones y en su odio hacia Uther, llevándola hasta una poderosa hechicera llamada Morgause. Aunque Morgana no sabía si podía creérselo de inicio, los poderes que Morgause le mostró le hicieron ver que tenían mucho en común y aceptó la palabra de ella cuando le dijo que era su hermana. Al haber sido mayor que ella cuando sus padres murieron, Morgause se marchó, pero no solo lo hizo por eso. Le cuenta entonces a Morgana que Uther es en realidad su padre, que cuando el padre de Morgause estaba en batalla, Uther, embelesado por la belleza de Igraine, la sedujo con magia, y ella nació de dicha unión. Asqueada por la hipocresía de Uther y alimentando su ira por el odio de su medio hermana hacia el rey, Morgana se alía con ella, considerando que al ser la primogénita de Uther es quien merece el trono, y no su medio hermano Arturo.
Tras varios intentos de conseguirlo, la mayoría frustrados por Merlín, Uther se percata de la influencia de Morgause en Morgana y esta es condenada a morir en la hoguera. Morgana no es capaz de hacer nada, y furiosa y dolida, se marcha de allí, diciendo a Uther que lo odia y jurando a Arturo que volvería y reclamaría el trono que por derecho considera suyo. Sabiendo además del afecto que Arturo sentía por su doncella, Gwen, la malmetió en su contra y la obligó a irse con ella, aunque poco después cada una tiró por su lado.
Durante los últimos años ha estado apartada, obteniendo los favores de diversos señores de otros reinos y perfeccionando sus artes mágicas, sobre todo en lo referente a la magia oscura. Tras la muerte de Uther, que llegó poco después de su marcha, Morgana ha estado pendiente de las noticias de Camelot y sabe que ahora, como nuevo rey, Arturo ha permitido la vuelta de la magia. Esto ha revelado la condición de Merlín, y Morgana, ofendida por los reproches de su antiguo amigo, al compartir los mismos dones, se ha jurado a sí misma vengarse y superarle como hechicera.
Ahora ha vuelto a Camelot, con nuevos y oscuros poderes, y con la idea de fingir arrepentimiento ante Arturo, ganarse su confianza y vengarse por la muerte de su media hermana, por el desprecio de Uther y por las mentiras de Merlín. No le importará mantener una fachada de amabilidad y cooperación, esperando el momento apropiado para hacerse con el trono. Parecía ir por buen camino, hasta que la maldición afectó al reino de Camelot, transportándola a este extraño mundo y convirtiéndola temporalmente en una persona distinta, al igual que a Arturo y Merlín, entre otros habitantes de Camelot.

» En GRIMMWELT UNIVERSITY:
Monique ha tenido una vida fácil, en una familia adinerada donde toda la atención se centraba en ella, al ser hija única. Siempre fue la niña de papá. Su padre, un importante empresario, pese al tiempo que necesitaba para mantener el nivel de sus ingresos, siempre sacaba tiempo para su hija, y cuando no le dedicaba el suficiente para hacerla feliz, lo compensaba con caros regalos a los que la niña se acostumbró. Su madre, por alguna razón siempre fue muy sumisa, y suele estar de acuerdo con su padre en casi todo. Pese a no consentirla tanto, y parecer no estar de acuerdo con los caprichos de su hija, nunca ha contradicho los deseos de su padre, y aunque Monique tiene más lazos con su padre, digamos que su madre tampoco le ha causado problemas.
Se ha pasado la vida en colegios privados, en fiestas de importantes accionistas y, cuando decidió que quería ser actriz, acudiendo a las mejores academias de preparación básica, hasta que, cuando terminó el instituto, sus padres la inscribieron en la prestigiosa Universidad Grimmwelt, en Alemania. Ella estuvo encantada de vivir fuera, ya que su padre la aseguró que, durante sus estudios, no le faltaría de nada y podría seguir comprando todo lo que necesitase o se le antojase desde la universidad. Así, Monique empezó sus estudios de Artes Escénicas, y aunque, como siempre, no hace amigos, sino “seguidores”, se ha hecho un hueco como una de las alumnas más populares y envidiadas, algo con lo que disfruta enormemente.
Debido a esa popularidad, de inicio por estatus, empezó a salir hace unos meses con el Capitán del Equipo de Fútbol de la universidad, Arthur Pennworth, y aunque no llegó a enamorarse de él, sí que se ha reconocido a sí misma que llegó a gustarle bastante. Mantuvieron una relación íntima durante unos meses, y de inicio ella se mostró agradable ante él, pero poco a poco, cuando creía tenerle comiendo de su mano, empezó a ser ella misma, y Arthur, diferente a otros chicos, no se dejó manipular. Por eso, cuando Monique consideró que no podía pedirle ciertas cosas, empezó a coquetear con otros miembros del equipo, en concreto con un chico que rivalizaba habitualmente con Arthur, y a espaldas de él, intentó manipularlo también, aunque esperando mantener su relación con Arthur. El problema fue que no hace mucho, Mark, el chico en cuestión, pidió algo más a Monique para seguir siendo su perrito faldero, y ella se enrolló con él en los vestuarios, con tal mala suerte que Arthur los encontró juntos. Aunque no llegó a acostarse con Mark, él mismo ha extendido el rumor de que sí, aunque a espaldas de la propia Monique, y pese a que ella intentó los primeros días arreglar las cosas con Arthur, él no se dejó engañar de nuevo, por lo que, ofendida y un tanto molesta, Monique ha difundido la noticia de que ha sido ella quien le ha dejado a él, y se muestra cuando está delante como si le despreciase. Aunque en el fondo sigue sintiendo cierta atracción hacia el chico, su odio por el desplante es mayor.




» PERTENENCIAS:
Como pertenencias especiales de algún tipo, no tiene nada que merezca la pena mencionar. Todo lo que alguna vez fue de su familia se quedó en Camelot, y cuando está allí suele contar con las pertenencias de toda noble, tales como joyas o vestidos, pero no posee nada en especial a lo que tenga un apego especial, pues se considera por encima de ese tipo de apegos materiales que no la llevan a ninguna parte.
En Grimmwelt University no es muy distinto. Está tan acostumbrada a tener siempre lo que quiere y pueda necesitar que para ella prácticamente todo es reemplazable. Puede montar un número si se le rompe un tacón de un zapato caro o se le estropea un vestido de marca de los muchos que pueda tener, pero es tan fácil como marcar el número de papi y pedir que le envíen por correo lo que le apetezca.

» OTROS DATOS:
Aunque ni ella ni Arthur lo saben, en realidad son hermanos por parte de madre. En una fiesta, durante la cual el padre de Arthur trabajó para ganarse un dinero extra, conoció a la madre de Monique y tuvieron una aventura de una noche, dejándola embarazada. Por eso no suele contrariar al padre de Monique, por la culpa ante esa aventura, y es un secreto que aún no ha revelado a nadie.